Contribuyentes

14 jul 2010

Y sonrío cada vez que paseas por mis recuerdos. Por los recuerdos en los que estamos juntos. Como cuando siento tu cuerpo junto al mío, cuando siento tu calor recorriendo mi piel, tus manos rodeando mi cintura, tu respiración en mi nuca y me susurras cosas al oído. En esos momentos siento que no hay nada mejor, solo ese instante, solo esa sensación de tenerte y de ser tuya me llena, me hace feliz.

Vernos a los dos reflejados en el espejo, verte abrazándome, viéndonos desnudos, juntos, y me dices lo hermosa que soy y no importa, me importa la forma en la que me miras. Cuando tus ojos se encuentran con los míos y no existe el mundo, solo tus ojos, entonces sonrío sin importar cuan mierda haya sido el día, solo miro tus ojos, mi corazón se acelera, siento un nudo en la garganta y sonrío, como estúpida, como tonta, como niña, que más da, solo sonrío.

Tenerte en mi cama, cerca, oír como me dices cuánto deseas que amanezcamos así, juntos, abrazados. Y entonces imagino ese día, acariciar tu cabello mientras duermes, darte un beso y acurrucarme a tu lado, donde me siento segura. Tal vez nunca te lo digo pero cuando estás conmigo me lleno de un paz inmensa, siento que me proteges. No sé de qué pero me siento protegida en tus brazos, siento que nada o nadie puede hacerme daño.

Me gusta ser uno contigo, sentirte, escucharte. Fundirse tu piel con la mía, sentir cada parte de ti en mí, darme por completo. Sentirte recorriendo mi cuerpo, subiendo por mi espalda hasta mi cuello y ver como mi cuerpo reacciona al tenerte ahí, así. Tus manos reconocen mi cuerpo, lo hacen suyo y no hago nada porque me gusta simplemente entregarme a ti.

1 comentario: